México debe condenar el secuestro de niños ucranianos por parte de autoridades rusas. No hacerlo es amoral, aseguró Dmytro Lubinets, ombudsman de Ucrania
Estamos agradecidos con el gobierno de México por su contundente postura condenando la agresión rusa, pero considero que declarar una neutralidad cuando un país miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU está secuestrando a los niños de otro país, realizando asimismo una política genocida es, por decir lo menos, amoral”, dijo a Excélsior con motivo de los mil días desde que inició la invasión, los cuales se cumplen hoy.
El funcionario llamó a nuestro país a adherirse a los esfuerzos mundiales para condenar la deportación de civiles ucranianos y desplazamientos forzados, en especial de los niños.
La deportación por Rusia de la población civil y en especial de los infantes es una grave violación del derecho internacional. Consideramos que las potencias tan importantes como México y Brasil deben adherirse a los esfuerzos internacionales destinados a la solución de dichos problemas”, afirmó Lubinets, en cuya cuenta de X hay una imagen con los colores de la bandera de su país y la leyenda “Ucrania es la capital del pueblo valiente”.
Además, 26 mil personas han resultado heridas y 65 mil 956 individuos se registraron como desaparecidos o capturados, de acuerdo con un conteo divulgado por la Embajada de Ucrania en México.
Los días 7 y 8 de noviembre pasados, Ucrania fortaleció su relación con México mediante la visita de Arsenii Pushkarenko, vicepresidente del Comité de Política Exterior, y Olga Strepochenko, Directora de Cooperación Internacional.
El ombudsman Dmytro Lubinets tuvo que partir urgentemente para coordinar el regreso de más de 500 cuerpos de defensores ucranianos que habían estado en cautiverio ruso. “El objetivo de las visitas de nuestra delegación a Brasil y México es atraer la atención de la comunidad internacional, especialmente la de América Latina, a la dimensión humanitaria de esta guerra, en particular a la detención en las condiciones inhumanas de los prisioneros de guerra ucranianos, de los prisioneros civiles (activistas ucranianos, periodistas detenidos por los rusos en los territorios temporalmente ocupados de Ucrania)”, expresó Lubinets.
El 17 de marzo de 2023 la Corte Penal Internacional emitió órdenes de arresto contra Vladimir Putin y la comisionada para los derechos del niño en Rusia, María Lvova-Belova, alegando responsabilidad por deportación y transferencia ilegal de niños durante la invasión rusa. ¿Podría detallar la situación con el retorno de la niñez de su país y liberación de los rehenes?
La situación actual con el regreso de niños deportados y desplazados por la fuerza es muy complicada. Ucrania ha verificado unos 20 mil casos de deportación y traslado forzado de niños. Si cada día se devolviera al menos un niño deportado a su país, Ucrania necesita más de 55 años para lograrlo.
Los rusos no proporcionan ninguna información sobre los niños ucranianos. No sólo eso, la Federación de Rusia expide documentos de ciudadanía rusa a niños ucranianos deportados y los adopta en familias rusas. Y esto no sólo tiene como objetivo “reeducar” a los niños ucranianos, el objetivo principal es la militarización decidida de los ucranianos: quieren crear una nueva generación de soldados.
Cada regreso de un niño ucraniano es una tarea grande y difícil. Encontrar el lugar de su permanencia, elaborar una ruta de regreso y pensar en los detalles es un trabajo multinivel de un equipo de personas de diferentes estructuras. Hasta el momento, mil 12 niños han sido devueltos a Ucrania.
Según los medios rusos, los niños son llevados a las regiones de Vladimir, Omsk, Rostov, Cheliabinsk, Saratov, Moscú, Leningrado, Krasnodar y la isla de Sajalín. Es decir, incluso a las regiones más remotas. Al mismo tiempo, sabemos que se redistribuye a niños en los territorios temporalmente ocupados de Ucrania.
En 2023 el presidente de Ucrania Volodímyr Zelenski lanzó la iniciativa Bring Kids Back UA que tiene como objetivo el regreso de los niños ucranianos deportados por Rusia, el desarrollo de formas familiares de educación, la integración de los niños retornados, entre otros.
¿Cómo percibe usted la colaboración en el ámbito de su competencia con América Latina y con México? Estaríamos agradecidos por las experiencias de los países latinoamericanos que han pasado por los desafíos similares, en especial de la celebración de las negociones de liberación de todos los prisioneros y deportados.
Estoy convencido de que, con los esfuerzos de todos los países de buena voluntad, lograremos restaurar el derecho internacional humanitario, devolver a los niños ucranianos y a los ciudadanos ucranianos deportados, así como llevar ante la responsabilidad de todos los culpables.
Considero que esto no es sólo de interés de Ucrania sino de todas las naciones del mundo si no queremos que los crímenes que Rusia está cometiendo hoy en mi país sean repetidos en ningún otro país.